DIA DE LOS FIELES DIFUNTOS.
ANIMACHARI
(KUINCHIKUA UALIRICHARI)
A partir del día 30 de octubre de cada año, los familiares más cercanos de los ya extintos, realizan las actividades o preparativos, para esperar a sus seres queridos, en las siguientes actividades, realizar la limpieza de cada uno de las tumbas y acondicionárselos, desgranar las mazorcas para poner el nixtamal personas invitadas o grupos religiosos después de que los rezos ofrecidos al difunto, al terminar se les ofrece , nacatamales, atoles, churipo y las corundas y atapacuas de queso, también se les prepara los platillos favoritos y tradicionales, para su ofrenda, como calabaza cocida en piloncillo, chilacayote (pulu), chayote (apupu), cocido, elote (tiripu) cocido conservado, este proceso se hace en la temporada desde el mes de septiembre se cosen los elotes con hojas después de cocidos se escurren y se amarran entre hojas o se mancuernan, posteriormente se cuelgan evitando se moje para que esto se seque, después se recoge se guarda o simplemente se deja colgada, ese elote pre cocido puede durar meses, años quedando los granos resecos y de menor densidad, cuando se requiera consumir se lava para quitar el polvo luego se pone en una olla con agua a hervir se sumergen los elotes hasta que se hinchen los granos después de una determinada hora esto se puede consumirse a esto se le llama, (uachacata), las figuritas de pan seco (bollitos), en donde los familiares acuden a la oficina del juzgado menor de tenencia a solicitar el permiso, y ofrecen vino de esa manera apartan el lugar para que las autoridades acompañen a los familiares de los difuntos para qué ellos como jueces juntamente con los grupos religiosos acudan a su domicilio a rasar el día primero de noviembre, conforme lleguen con las autoridades así formalizan el compromiso y acudan al domicilio del las animas, o fieles difuntos en donde se les ofrece un rezo para que descanse en paz los difuntos o animas, esto se da únicamente a los difuntos que fallecieron en ese año y después de las animas, o el día 2 de noviembre del año anterior, ya sea adultos, jóvenes o niños, en donde colocan ramos de flores tradicionales como el zimplazuchil (TIRINGUIN TSITSIKI), en un arco llenos de flores (uilimukua) y ofrenda dedicada al difunto, en la entrada de la casa, en donde los jueces y las uananchitis acuden al domicilio en donde forman 2 a 3 grupos para que alcances a recorrer a cada uno de sus casas y ellos son los que recogen toda la ofrenda para ellos, también ponen un altar de ofrendas con flores, velas, frutas de la temporada como guayabas, chilacayotes cocido con piloncillo, chayotes cocidos, sin faltar su vela de cera, eso significa que aun los quieren por eso les ofrecen comida, de lo que les gustaba de vida, para cuando ellos regresan se lleven su comida y la vela para que se iluminen su camino de regreso y en el lugar que descansan, porque se dice que espiritualmente ellos, regresan del paraíso, en donde los demás los esperan los que ya no cuentan con familiares que se acuerdan de los difuntos y que tienen tiempo de fallecidos y que nadie los recuerda, ellos esperan que les hayan enviado su ofrenda, se inicia a las 12 p/m hasta agotar en todas las casas de donde esperan a los difuntos en ese año, en ese mismo día acuden los familiares acuden al camposanto, a prenderles las velas en sus tumbas o (kumsta) en vista de que el panteón no cuenta con alumbrado, los niños de acuerdo en la época van al campo sembrado en donde cortan chilacayotes maduros de preferencia en donde los niños, recortan un cuadro o rectángulo de un promedio 10 cm. X 15 cm. Con el propósito de que puedan maniobrar con la mano para extraer toda la pulpa y semillas dejando toda la corteza, y dibujan figuras de la corteza dejando una capa delgadita con la finalidad de que tranparente la iluminación y así poder conducir a los adultos, en donde es colocada una vela encendida a eso se le llama calavera de pulu, la calavera lo protege por los vientos evitando apagar la vela porque sirve para que los adultos se conduzcan bien al cementerio por la noche y estar en compañía con seres queridos, y a platicar y recordar sus buenos ejemplos como parte que fue de la familia, ya que por lo general los panteones existen en las orilla de los pueblos, el día 2 de noviembre de cada año, desde temprana hora todos los familiares de los seres queridos nuevamente los visitan en el panteón o en el campo santo les llevan ofrenda de acuerdo la época y de sus posibilidades en donde son clocadas sobre su tumba con canastos, tapado con sus lucidas servilletas bordadas o de telar de mano elaboradas por ellas mismas, después invitan a una persona que sabe rezar en donde él empieza a ofrecerle los rezos para que descanse en paz y este con dios que es el creador de la madre naturaleza, al terminar se le entrega toda la ofrenda que es destinado para el y para los demás parientes que fueron y que convivieron en su tiempo, así se les recuerda año con año a los difuntos, después de culminar todas las familias regresan satisfechos porque están consientes de que ya convivieron aunque no personal pero sí en forma espiritual.
ANIMACHARI
(KUINCHIKUA UALIRICHARI)
A partir del día 30 de octubre de cada año, los familiares más cercanos de los ya extintos, realizan las actividades o preparativos, para esperar a sus seres queridos, en las siguientes actividades, realizar la limpieza de cada uno de las tumbas y acondicionárselos, desgranar las mazorcas para poner el nixtamal personas invitadas o grupos religiosos después de que los rezos ofrecidos al difunto, al terminar se les ofrece , nacatamales, atoles, churipo y las corundas y atapacuas de queso, también se les prepara los platillos favoritos y tradicionales, para su ofrenda, como calabaza cocida en piloncillo, chilacayote (pulu), chayote (apupu), cocido, elote (tiripu) cocido conservado, este proceso se hace en la temporada desde el mes de septiembre se cosen los elotes con hojas después de cocidos se escurren y se amarran entre hojas o se mancuernan, posteriormente se cuelgan evitando se moje para que esto se seque, después se recoge se guarda o simplemente se deja colgada, ese elote pre cocido puede durar meses, años quedando los granos resecos y de menor densidad, cuando se requiera consumir se lava para quitar el polvo luego se pone en una olla con agua a hervir se sumergen los elotes hasta que se hinchen los granos después de una determinada hora esto se puede consumirse a esto se le llama, (uachacata), las figuritas de pan seco (bollitos), en donde los familiares acuden a la oficina del juzgado menor de tenencia a solicitar el permiso, y ofrecen vino de esa manera apartan el lugar para que las autoridades acompañen a los familiares de los difuntos para qué ellos como jueces juntamente con los grupos religiosos acudan a su domicilio a rasar el día primero de noviembre, conforme lleguen con las autoridades así formalizan el compromiso y acudan al domicilio del las animas, o fieles difuntos en donde se les ofrece un rezo para que descanse en paz los difuntos o animas, esto se da únicamente a los difuntos que fallecieron en ese año y después de las animas, o el día 2 de noviembre del año anterior, ya sea adultos, jóvenes o niños, en donde colocan ramos de flores tradicionales como el zimplazuchil (TIRINGUIN TSITSIKI), en un arco llenos de flores (uilimukua) y ofrenda dedicada al difunto, en la entrada de la casa, en donde los jueces y las uananchitis acuden al domicilio en donde forman 2 a 3 grupos para que alcances a recorrer a cada uno de sus casas y ellos son los que recogen toda la ofrenda para ellos, también ponen un altar de ofrendas con flores, velas, frutas de la temporada como guayabas, chilacayotes cocido con piloncillo, chayotes cocidos, sin faltar su vela de cera, eso significa que aun los quieren por eso les ofrecen comida, de lo que les gustaba de vida, para cuando ellos regresan se lleven su comida y la vela para que se iluminen su camino de regreso y en el lugar que descansan, porque se dice que espiritualmente ellos, regresan del paraíso, en donde los demás los esperan los que ya no cuentan con familiares que se acuerdan de los difuntos y que tienen tiempo de fallecidos y que nadie los recuerda, ellos esperan que les hayan enviado su ofrenda, se inicia a las 12 p/m hasta agotar en todas las casas de donde esperan a los difuntos en ese año, en ese mismo día acuden los familiares acuden al camposanto, a prenderles las velas en sus tumbas o (kumsta) en vista de que el panteón no cuenta con alumbrado, los niños de acuerdo en la época van al campo sembrado en donde cortan chilacayotes maduros de preferencia en donde los niños, recortan un cuadro o rectángulo de un promedio 10 cm. X 15 cm. Con el propósito de que puedan maniobrar con la mano para extraer toda la pulpa y semillas dejando toda la corteza, y dibujan figuras de la corteza dejando una capa delgadita con la finalidad de que tranparente la iluminación y así poder conducir a los adultos, en donde es colocada una vela encendida a eso se le llama calavera de pulu, la calavera lo protege por los vientos evitando apagar la vela porque sirve para que los adultos se conduzcan bien al cementerio por la noche y estar en compañía con seres queridos, y a platicar y recordar sus buenos ejemplos como parte que fue de la familia, ya que por lo general los panteones existen en las orilla de los pueblos, el día 2 de noviembre de cada año, desde temprana hora todos los familiares de los seres queridos nuevamente los visitan en el panteón o en el campo santo les llevan ofrenda de acuerdo la época y de sus posibilidades en donde son clocadas sobre su tumba con canastos, tapado con sus lucidas servilletas bordadas o de telar de mano elaboradas por ellas mismas, después invitan a una persona que sabe rezar en donde él empieza a ofrecerle los rezos para que descanse en paz y este con dios que es el creador de la madre naturaleza, al terminar se le entrega toda la ofrenda que es destinado para el y para los demás parientes que fueron y que convivieron en su tiempo, así se les recuerda año con año a los difuntos, después de culminar todas las familias regresan satisfechos porque están consientes de que ya convivieron aunque no personal pero sí en forma espiritual.
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